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Capitulo Cuarto
A pocos kilómetros de allí, en una vieja casona de campo encerradas en una pieza estaban Ana María y Leonora.
Si bien tenían ambas las manos atadas se podían desplazar por la habitación pero la puerta era de madera muy fuerte y maciza y la ventana tenía del lado de afuera rejas de hierro.
Las desataban solo para darle un vaso de agua, al darles de comer.
Debían consumir los alimentos tomandolos con sus manos porque no le daban ni tenedor ni cuchillo y lo hacían vigiladas por una persona que usaba una máscara en su cara y ropa negra amplia. Ana María sospechaba que la persona que los vigilaba era una mujer, aunque no se notaba muy bien su físico detrás de esa vestimenta y como no podía acercarse ideó una estrategia para distraerla. Le habló al oído a Leonora y le dijo cuando nos traiga de comer al acercarse empujame...Cuando llegaba con el plato de comida Ana María fingió tropezar cuando se cruzó con Leonora empujándola contra el individuo que al cargar con los alimentos no tuvo tiempo de sacar el arma, en el forcejeo lo golpeó con ambas manos en la cabeza desvaneciendolo.
Al caer le quitó la máscara y mirando Ana María le dijo “sácale el arma”-Se la sacó de la cintura y tomándola con las dos manos, que aún la tenía atadas le apuntaba casi con desesperación al secuestrador.
¡¡¡Mirá quién es la desgraciada!!!
*foto gratis de px
(Continuara en un próximo capitulo
Capitulo Cuarto
A pocos kilómetros de allí, en una vieja casona de campo encerradas en una pieza estaban Ana María y Leonora.
Si bien tenían ambas las manos atadas se podían desplazar por la habitación pero la puerta era de madera muy fuerte y maciza y la ventana tenía del lado de afuera rejas de hierro.
Las desataban solo para darle un vaso de agua, al darles de comer.
Debían consumir los alimentos tomandolos con sus manos porque no le daban ni tenedor ni cuchillo y lo hacían vigiladas por una persona que usaba una máscara en su cara y ropa negra amplia. Ana María sospechaba que la persona que los vigilaba era una mujer, aunque no se notaba muy bien su físico detrás de esa vestimenta y como no podía acercarse ideó una estrategia para distraerla. Le habló al oído a Leonora y le dijo cuando nos traiga de comer al acercarse empujame...Cuando llegaba con el plato de comida Ana María fingió tropezar cuando se cruzó con Leonora empujándola contra el individuo que al cargar con los alimentos no tuvo tiempo de sacar el arma, en el forcejeo lo golpeó con ambas manos en la cabeza desvaneciendolo.
Al caer le quitó la máscara y mirando Ana María le dijo “sácale el arma”-Se la sacó de la cintura y tomándola con las dos manos, que aún la tenía atadas le apuntaba casi con desesperación al secuestrador.
¡¡¡Mirá quién es la desgraciada!!!
*foto gratis de px
(Continuara en un próximo capitulo
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